El danés Mads Pedersen (Trek-Segafredo) se alzó este domingo con el triunfo en la Kuurne-Bruselas-Kuurne, tras imponerse al esprint al francés Anthony Turgis (Total Direct Energy), segundo, y al británico Thomas Pidcock (INEOS Grenadiers), que concluyó en la tercera plaza.
No obstante, el gran protagonista de la carrera fue el neerlandés Mathieu Van der Poel, que rompió la prueba con un ataque a falta de 80 kilómetros para la línea de meta.
Un fortísimo ataque al que tan sólo pudo responder el corredor ecuatoriano del INEOS, Jhonatan Narváez, que junto con Van der Poel fue distanciándose cada vez más y más del grupo de favoritos hasta alcanzar casi el minuto de ventaja.https://74f5cf2649a81252c1ef5abb698ce2d1.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-37/html/container.html
Con Van der Pol empeñado en abrir hueco, el dúo de fugados fue poco a poco atrapando a los integrantes de la escapada inicial de la etapa, hasta conformar un grupo de cinco corredores.
Un quinteto en el que además de los ya mencionados Van der Poel y Narváez figuraban el austríaco Patrick Gamper (Bora), el noruego Jonas Hvideberg (Uno-X) y el kazajo Artyom Zakharov (Astana).
Siempre comandado por Mathieu van der Poel, el grupo de fugado soñó con la victoria tras alcanzar los últimos siete kilómetros de la prueba con una ventaja de 20 segundos.
Una diferencia que de diluyó en un abrir y cerrar de ojos con el acelerón del corredor danés del Deceuninck, Kasper Asgreen, que permitió al grupo de favoritos atrapar al quinteto liderado por Van der Poel a menos de dos kilómetros para la conclusión.
Una circunstancia que no desaprovechó el también danés Mads Pedersen, perfectamente lanzado por su compañero, el belga Jasper Stuyven, para alzarse con el triunfo en un esprint en el que el corredor del Trek-Segafredo no dio ni la más mínima opción a ninguno de sus rivales.