Por el Ing. Silvio Durán
El drenaje pluvial en la ciudad de Santiago representa una problemática acumulada durante décadas, producto de la falta de inversión, planificación y seguimiento por parte de las distintas administraciones municipales. Como ingeniero, considero que hoy más que nunca se hace impostergable abordar este tema desde una perspectiva técnica, realista y de largo alcance, si queremos evitar que cada temporada de lluvias se traduzca en caos, pérdidas y retroceso urbano.
Una problemática histórica e invisible
Los problemas actuales del drenaje pluvial no son nuevos. Son el resultado de la acumulación de omisiones de muchas gestiones que no realizaron las inversiones necesarias, en parte porque estas infraestructuras no se ven a simple vista: están enterradas. Sin embargo, sus consecuencias son evidentes y afectan la vida cotidiana de nuestra gente: calles anegadas, daños a las infraestructuras, problemas sanitarios y pérdida de bienes.
Muchas de estas redes fueron construidas en zonas sin planificación urbana, sin diseños pluviales apropiados y con tuberías que no cumplen los diámetros adecuados, lo cual agrava la situación en cada evento climático.
Un plan de solución por etapas
Propongo que la solución se estructure en varias etapas, con una visión de largo plazo. Abrir zanjas de gran tamaño por toda la ciudad no es viable. Por eso planteo el uso de tecnologías modernas como los topos, que permiten instalar tuberías subterráneas sin romper las calles. Aunque esta técnica también genera inconvenientes, sería mucho menos traumática para la ciudad que una excavación abierta tradicional.
Esta problemática no podrá resolverse sin el respaldo del gobierno central, razón por la cual sugiero gestionar financiamiento a través de organismos multilaterales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Agencia Francesa para el Desarrollo o la Agencia Española de Cooperación, entre otros.
Necesidad de un catastro urbano
Lo primero que debemos hacer como ciudad es levantar un catastro técnico de todas las tuberías pluviales existentes. Este levantamiento permitirá revisar su ubicación, estado, materiales y diámetros, y sobre todo, determinar si responden a las necesidades reales de sus zonas de influencia.
Con esta información será posible proyectar correctamente futuras urbanizaciones, asegurando que pasen por la Oficina de Planeamiento Urbano y se evalúen desde su fase inicial, incorporando drenaje pluvial eficiente desde el diseño.
Mantenimiento preventivo y control sanitario
De forma inmediata, debemos realizar mantenimientos preventivos antes de la temporada ciclónica, que va de junio a noviembre. Este mantenimiento debe incluir limpieza de imbornales, revisión de tuberías, eliminación de obstrucciones y detección de conexiones sanitarias indebidas.
En algunos sectores de la ciudad, se ha detectado la conexión de aguas residuales a redes pluviales, lo que provoca que esas aguas lleguen sin tratamiento a nuestros ríos. Esto representa un serio riesgo ambiental y de salud pública que debe corregirse de inmediato.
Soluciones sostenibles: aprendizajes internacionales
En muchos países se han adoptado soluciones innovadoras para la gestión del agua pluvial, y Santiago no puede quedarse atrás. Estas incluyen:
• Techos y áreas verdes que retienen y filtran el agua
• Pavimentos porosos que permiten su infiltración
• Construcción de cisternas y lagunas de retención para el tratamiento y aprovechamiento del agua
• Sistemas descentralizados que ayudan a mitigar el impacto de las lluvias en zonas vulnerables
Estas alternativas deben ser consideradas especialmente en las zonas más críticas de la ciudad.
Zonas vulnerables y urgencia de acción
Santiago presenta puntos críticos donde el problema del drenaje es recurrente. Entre ellos destaco:
• Calle Antonio Guzmán, antes de llegar a La Barranquita
• Ensanche Libertad
• Varias rotondas del centro de la ciudad
• Avenida Estrella Sadhalá, entre otras
Estos sectores requieren intervenciones urgentes. Las inundaciones no solo causan daños materiales, sino que también profundizan la pobreza, detienen el comercio y afectan gravemente la calidad de vida de nuestros ciudadanos.
Una visión técnica y humana para el futuro
Insisto en que toda nueva urbanización debe pasar por un análisis integral que contemple el impacto del drenaje pluvial. Este debe ser evaluado desde el diseño, tomando en cuenta las áreas naturales de descarga dentro del mismo entorno urbano.
Si no comenzamos hoy, mañana será mucho más costoso, tanto en términos económicos como sociales. Santiago merece soluciones técnicas, viables y sostenibles.
Esta exposición fue presentada por mí, el Ing. Silvio Durán, durante el panel “Hacia una sociedad más equitativa, moderna e integral”, celebrado el 18 de junio del presente año, a las 7:00 p.m. en el Hotel Matum de Santiago, Auspiciado por el movimiento DESPERTAR PROGRESISTA DOMINICANO donde participaron decenas de personas comprometidas con el desarrollo de nuestra ciudad.