El presidente de Siria, Bashar al Asad, de visita sorpresa en Moscú, ha acusado a “ciertos países” de obstruir las negociaciones de paz entre el régimen y la oposición en el país árabe, que por su culpa están “estancadas”.
“(…) Quisiera subrayar el hecho de que los procesos políticos que llevábamos a cabo están estancados desde hace unos tres años”, señaló Al Asad durante una reunión no anunciada con el presidente ruso, Vladímir Putin, el lunes por la noche en el Kremlin y de la que la Presidencia rusa solo informó este martes. EFE