Por Nelson Peralta
Santiago, RD.- La Asociación de Empresas de Zonas Francas de Santiago, justificó ayer los incentivos que recibe el sector porque le permite hacer aportes importantes para el desarrollo económico, como ocurrió en el año 2016 que pagaron tributos a la Tesorería Nacional ascendente a los RD$5,480 millones
La entidad que presidente Luis Jose Bonilla Bojos, expresó su parecer del estudio publicado por el Banco Mundial denominado “Hacia un sistema tributario más eficiente”.
La Asociación de Empresas de Zonas Francs de Santiago, ve contradictorio, la reciente publicación del Banco Mundial en la que plantea un escenario totalmente diferente a lo expresado en un informe publicado por el mismo organismo en el año 2017.
“En el referido estudio del pasado periodo, enfatizan que República Dominicana es uno de los pocos países a nivel mundial que desde sus inicios ha utilizado el sistema de Zonas Francas de forma efectiva como un motor importante para la generación de empleos y fomento del crecimiento económico del país y el dinamismo exportador”, sostuvo.
La cúpula empresarial de Santiago consideró, además, que para una relación realista se debe evaluar de manera integral tanto el costo como el aporte que traen consigo las zonas francas al país y el impacto positivo que tiene para el mismo en todas sus vertientes.
Se recuerda que el análisis afirma que los incentivos fiscales que reciben las empresas del sector son ineficientes para el sistema económico dominicano.
“Para el 2016, los pagos de las zonas francas a nivel nacional a la Tesorería de la Seguridad Social ascendieron a más de 5,580 millones de pesos durante ese año”, explica Bonilla Bojos.
Actualmente la empleomanía del sector de zonas francas en el Cibao, suma más de 72,000 empleados directos, convirtiéndose en uno de los mayores generadores de empleos de la Región.
Para evaluar la incidencia que tienen los empleados de zonas francas para el desarrollo socioeconómico del país, solamente hay que remontarse a mediados de la década del 2000 a la crisis que afectó el sector, con la cual solo en la Región Norte se perdieron más de 45,000 empleos formales.
Dijo que en ese entonces y sus años posteriores, la falta de empleo originó un aumento de delincuencia, violencia e informalidad laboral.
Y agregó que “hoy en día, de manera general los empleados informales del país representan el 51.2% de las estadísticas del mercado laboral a nivel nacional, convirtiéndose en una gran fuente de evasión fiscal e incumplimiento de materia tributaria”.