SANTO DOMINGO.- Fue puesta a disposición de la justicia este lunes la mujer que el pasado sábado le provocó la muerte a su sobrino de tan sólo ocho años, luego de torturarlo a golpes, en un hecho ocurrido en Verón, Punta Cana.
Se trata de la señora Carmen Jiménez, acusada junto a Gonzalo Valencio Rojas, quien le acompañó a llevar el menor sin signos vitales al Hospital de Verón la noche del pasado sábado.
El niño era hijo de un hermano de Jiménez, quien le depositaba 6,000 pesos quincenal para su cuidado y alimentación. Según el informe del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), el pequeño recibió 147 heridas y le provocaron la caída de seis dientes.
De acuerdo a testimonios de un familiar de la víctima, el pequeño “era muy inquieto y rompía objetos en la casa”, lo que pudo generar la ira de su tía.
Según reportan medios de la provincia La Altagracia, la mujer confesó este lunes que cometió el hecho porque el pequeño “era muy inquieto y rompía objetos en la casa”.